Se niega a compartir sus juguetes con otros niños y, más aún, con su hermanito. ¿Cómo actuar?
¡Es mío!. Es una de las frases que, a esta edad, más escuchamos decir a nuestros hijos, esos pequeños “egoístas” que se niegan a compartir sus cosa con los demás. El hecho de aprender a compartir es algo muy duro para un niño y es un tema que preocupa mucho a los padres. ¿Por qué no quiere no prestar sus cosas a sus amiguitos? ¿Seguirá siendo tan egoísta cuando sea mayor? ¿Es una etapa normal del desarrollo?. Veamos todas las respuestas.
¿Es normal que sea tan egoísta?
Cuando el pequeño empieza a jugar con otros niños se producen muchas peleas por los juguetes. Sin embargo, esto no indica que los padres estén dando mala educación a su hijo, o que éste sea travieso por naturaleza; es un comportamiento absolutamente normal a esta edad. Pero, ¿Por qué se produce?
A esta edad la capacidad de compartir de un niño se haya limitada por su inmadurez evolutiva. A diferencia de los bebés, los niños de esta edad, han empezado a desarrollar un sentido separado del “yo”. Comienzan a captar el sentido de posesión y se vuelven egocéntricos. Por otra parte el niño aun o es capaza de empatizar, es decir, de ponerse en el lugar del otro y saber lo que este siente cuando le niegan el derecho de usar un juguete.
Además, los niños no entienden aun el concepto de permanencia de los objetos, es decir, que un objeto que sale de la habitación no desaparece para siempre. Por otro lado, el pequeño tampoco comprende que sus juguetes seguirán siendo suyos aunque se los deje a un amiguito.
¿Qué deben hacer los padres?
Es normal que los padres se preocupen por el creciente egoísmo de sus hijos sin embargo, no deben obsesionarse por ello. Han de comprender que esta es una fase más del desarrollo del niño y que, con el paso del tiempo, ira desapareciendo.
Lo mejor que pueden hacer los padres es no mostrar actitudes extremas, es decir, no reñir al niño constantemente ni ser demasiado permisivos. La propia evolución psicológica del pequeño, a la paciencia y compresión de los padres harán que el niño se vaya dando cuenta, poco a poco, de lo importante y beneficioso que es compartir cosas con los demás niños.
Resulta indispensable reforzar los primeros esfuerzos del pequeño por compartir, elogiándole cuando se decida a prestar sus juguetes a otros niños.
Una buena idea es poner a los niños juegos que fomente la colaboración, como rompecabezas, pizarrones para pintar o disfraces, que invitan a los pequeños a jugar juntos.
ES MUY IMPORTANTE DAR EJEMPLO
Aunque seguramente, pasara bastante tiempo hasta que el niño sea capaza de compartir sus cosas con los demás, los padres pueden establecer las bases para el futuro lo antes posible. ¿Cómo?.
En primer lugar, es muy importante dar ejemplo. Se puede decir al niño: “voy a compartir estas galletas con tu papá. ¿Quieres tu compartir tu jugo conmigo?”.
Si el pequeño nos ofrece su bebida, debemos mostrarnos muy contentos para expresarle que ha hecho algo muy positivo.
Por otro lado, podemos explicarle cómo se sienten otros niños cuando él se niega a compartir sus juguetes: “María está triste, porque quería jugar con tu osito y tu no se lo prestaste. Si quieres que se ponga contenta compártelo con ella”.